viernes, julio 27, 2007

Ícaro y Dédalo

En la mitología griega, Ícaro era hijo de Dédalo, un arquitecto, que construyó el laberinto de Creta. Luego de la construcción del mítico laberinto, ambos fueron encarcelados, sin posibilidades algunas de salir. Y ese encarcelamiento al cual me refiero, se debió a que el rey de Creta, el despiadado Minos, estaba algo paranoico por si se llegase a revelar la salida desde esa construcción.
El laberinto fue mandado a construir por Minos, luego de la caída de Atenas. El objeto del laberinto consistía en introducir, dentro de él, al botín de guerra, consistente en siete doncellas y siete mancebos, que se debían enviar cada nueve años a ese lugar, a fin de ser devorados por el Minotauro en su interior.
Minos controlaba las aguas del mar y la tierra desde todos sus puntos, a excepción de los cielos. Para volver a respirar el aire, y sentir el aroma de la libertad, Dédalo se empeño en construir un par de alas, tanto para él como para su hijo Ícaro, a fin que pudieran volar desde ese lugar, ya que el cielo no era del dominio de Minos.
Empezó a recoger plumas, grandes y chicas, a fin de comenzar la tarea lo mas pronto posible. Unió las mas grandes con hilos, mientras que las plumas mas pequeñas las unió con cera, a fin que esa estructura fuese realmente fuerte.
Luego de haber terminado la construcción de los utensilios aeronáuticos, Dédalo se las pone primero, para posteriormente hacer lo mismo Ícaro, cuando, estando una vez en el cielo, fuese soltado por su padre para emprender el vuelo solo. También le ensañó a volar a Ícaro, para que no fracasara la empresa. Así se hizo, y Dédalo le advierte a su hijo que no vuele tan alto, porque el calor del sol derretiría la cera de las alas, y que no volara tan bajo, porque si se mojaba con el agua del mar impediría que retomara el vuelo nuevamente.
Iban volando por los aires, y Dédalo advertía a su hijo que no volara tan alto, pero el porfiado mequetrefe mitológico no hacía caso.
Volaron por Samos, y Delos. También por Lebintos. El pequeño volador siguió subiendo cada vez mas, como si con eso creyese que iría junto con los dioses. Pero lamentablemente desoyendo a su padre, llego tan cerca del sol que las junturas de sus alas comenzaron a derretirse, y como cuan kamikaze, se precipitó a las profundas aguas del mar.
Dédalo se salvó, y llego a tierra firme, arrepentido de su invención.
Las costas cercanas al lugar de la muerte de Ícaro fue llamada Icaria.
Ícaro, a primera vista, es un arquetipo al cual se le pueden (o se deberían) dar dobles lecturas. Por un lado, representa el esfuerzo del hombre en llegar mas alto, en ideales y logros personales, con esfuerzo y dedicación. Por otro lado, Ícaro representa también la soberbia y el desacato, con las posteriores consecuencias que conlleva.
¿Cuál les siente mejor? Se los dejo al beneficio de la duda.
Esta leyenda ha inspirado a muchos. En lo personal, me recuerda al arcano XVI del Tarot, “La Torre”, en la cual, a grandes rasgos, las empresas emprendidas con soberbia no llegan a buen término (tal como se supone ocurrió con la torre de Babel, cuya construcción supuso un desafío al dios de esos hombres). Pero también me inspira la inocencia cuando nos enceguecemos por los grandes triunfos en la vida.
Y bueno, seguramente habrán sucios y cochinos mitómanos que se creen Ícaro, y que aseguran haber volado sin haber caído. Conozco algunos que dicen ser una cosa y haber estado en otras miles al mismo tiempo.
Rebeca Matte, escultora chilena, recuerda este episodio con el monumento erigido al frente del Museo de Bellas Artes, llamado “Ícaro y Dédalo, en la gloria y la muerte”.
La tumba de Alberto Santos Dumont y sus padres, es una replica exacta a una escultura existente en el parque Saint-Cloud de París, erigida precisamente en vida a este aviador.

5 Comments:

Blogger Jorge A. Gómez Arismendi se mando el siguiente carril:

Esta historia es una de las que más me gusta, porque es una hermosa metáfora con respecto a la humildad, la templanza, la paciencia y la no ambición.
El ser humano en general quiere tener el sol, para sí, para nadie más y en eso, perdemos las alas, que representan la posibilidad de elevarnos por sobre la ambición.
Saludos gran Mario.

julio 30, 2007 11:06 p. m.  
Blogger Mario se mando el siguiente carril:

Así es compañero... es increíble como se pueden crear mundos a partir de cosas inexistentes como es la mitología.
Hay que adentrarse de vez en cuando en los mundos paralelos, mas de alguna enseñanza o metáfora podemos encontrar.
Saludos

agosto 01, 2007 3:30 p. m.  
Blogger Unknown se mando el siguiente carril:

oiga barry, gracias por visitarme
le digo algo....hay q tener ese musculo llamado corazón , aunq uno sufra , se desespere, goce con locura.....solo que aveces hay q dejarlo descanzar para que decante de la vida y sentimientos y se fortalesca

un abrazo

pd: me encanto el nuevo integrante
pacita

agosto 08, 2007 3:40 p. m.  
Blogger Mario se mando el siguiente carril:

Pacita, es verdad, el musculito de harto nos sirve, pero insisto, también nos hace doler. En todo caso me trato de dar el tiempo para que mire a su alrededor y pueda tener el merecido descanso psiquiátrico que se debe dar sí o sí.
No hay nada mas lindo que una vida llena de alegrías... por eso me permito descansar a mi corazón, y esperar a que lleguen para disfrutarlas.
Y respecto al nuevo integrante que esta causando furor y sensación (como el sonidero de Cafe Tacuba), debo decir que la cólera se apodera de su corta edad, siendo con creces una verdadera semilla de maldad. Pero así es nomás el desarrollo de este infante.
Muchos saludos

agosto 14, 2007 2:03 a. m.  
Blogger Unknown se mando el siguiente carril:

Que gran mitologia,llena de valores intransables, que locura de dedalo y que inprudencia de icaro

noviembre 27, 2008 4:10 p. m.  

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